El
mastering es la etapa final de la producción musical, donde se pule y optimiza tu mezcla para que suene equilibrada, potente y coherente en cualquier sistema de reproducción.
Pero un buen mastering empieza siempre con
una buena mezcla. Si la mezcla no está bien preparada, ni el mejor ingeniero podrá sacar el máximo potencial de tu canción.
Si necesitas que tu mezcla esté completamente lista, ofrecemos un servicio profesional de mezcla y mastering online que garantiza el máximo potencial de tu tema.
En este artículo he redactado un checklist imprescindible para entregar tu mezcla lista para enviarla mastering profesional.

1. Exporta en el formato correcto
✔ Formato adecuado: WAV o AIFF. ¡Nunca un mp3!
✔ Profundidad de bits: 24 bits, incluso cuando el producto final vaya a estar a 16, procesar en mastering a 24 bits da más dinámica y resolución interna.
✔ Frecuencia de muestreo: la misma con la que grabaste/mezclaste (no la cambies al exportar).
❌ Lo más importante, nunca envíes MP3 ni archivos comprimidos: reducen calidad y limitan lo que se puede lograr en el mastering.
2. Deja suficiente margen dinámico.
El error más común es entregar mezclas demasiado fuertes, muy precomprimidas y limitadas. Eso reduce enormemente el trabajo que puede hacer el ingeniero de mastering.
✔ Nivel de pico máximo: alrededor de -6 dBFS. No tiene que ser exacto, es orientativo, pero la idea es que haya espacio para poder aumentar la ganancia en mastering.
✔ No uses limitadores en el bus master para subir el volumen final.
El ingeniero de mastering necesita ese margen para trabajar la dinámica sin distorsión.
3. Controla la mono-compatibilidad
✔ Revisa que la mezcla no se "venga abajo" cuando la escuchas en mono.
Lo mejor es poner la mezcla en mono y
escuchar con un sólo monitor, como hacemos los ingenieros de mezcla usando para ello un sólo Auratone o un
Mixcube, por ejemplo.

Mixcube, uno de los mejores monitores para escucha en mono (lo tenemos en el estudio).
4. Asegúrate de que la mezcla suene equilibrada
El mastering nivela y cohesiona la mezcla pero no puede arreglar balances excesivamente grandes de volumen entre instrumentos:
✔ Comprueba que voz, bajo, batería y elementos principales tengan el peso adecuado.
✔ Escucha tu mezcla si es posible en diferentes sistemas (auriculares, coche, altavoces pequeños).
✔ Haz pausas: mezclar cansado puede engañar a tu oído.
Para manejar mejor los problemas de balance, existe el mastering por stems, en el que se masteriza a partir de los stems de cada grupo (voz, batería, guitarras, bajo, etc.). Así se puede hace un ajuste si hay desniveles importantes. Puedes pedir este tipo de masterización a nuestro estudio.
5. Evita procesar en exceso el bus master
✔ Quita excitadores o maximizers que busquen "hacer sonar fuerte" la mezcla.
✔ Si usas compresión en el bus, mantenla sutil (2-3 dB de reducción como máximo).
6. Escucha la mezcla con referencias
Antes de enviarla:
✔ Compárala con canciones profesionales de tu mismo estilo.
✔ No busques igualar el volumen, sino el equilibrio tonal y la sensación general.
7. Habla con tu ingeniero de mastering
✔ Explica qué buscas: más dinámica o más nivel, más brillo o un carácter más cálido, etc. Dale las referencias que necesites, si es que las tienes.
Checklist rápido antes de enviar tu mezcla
✅ Archivo WAV/AIFF, 24 bits.
✅ Picos en torno a -6 dBFS.
✅ Sin limitadores en el master.
✅ Balance de instrumentos correcto.
✅ Revisión de mono-compatibilidad.
Conclusión:
una buena mezcla = un gran mastering.
El mastering no es magia: es el arte de perfeccionar una mezcla ya bien trabajada.
Si sigues este checklist, tu canción tendrá todo lo necesario para brillar en su versión final.
Y si necesitas asegurar el mejor resultado, en The Punch Mastering & Mix ofrecemos un servicio profesional de mezcla y mastering online, con revisiones ilimitadas hasta que quedes 100% satisfecho, tanto en mezcla como en masterización.👉 Contáctame aquí y nos ponemos a trabajar en tu proyecto.